Imprevistos
|
| La importancia de la observación |
13/07/2007 |
|
Hola a tod@s.
En esta ocasión querÃamos comentaros una mala experiencia que tuvimos con una pareja de aratinga jandaya.
Para nuestra desgracia somos el único aviario al que no solo le suceden cosas buenas, a veces también tenemos algún contratiempo con las aves o con la crÃa.
En el año 2005 hicimos un cambio con un importador-criador afincado en la zona de Alicante.
Nosotros tenÃamos demasÃa de hembras por lo que buscando machos contactamos con este señor y cambiamos una de nuestras preciosas hembras por un macho.
Todo parecÃa correcto aunque en el cambio hubo detalles que no nos gustaron, el pájaro llegó y pasada la cuarentena que les hacemos a todas las aves de nueva adquisición los presentamos. Fue un amor a primera vista, aunque generalmente las aratinga no suelen dar problemas a la hora de ser emparejadas.
Rápidamente empezaron ha acicalarse, a darse de comer y ....................... en fin arreglando el nido.
Pasados unos 20 dÃas la hembra empezó a entrar al nido durante el dÃa culminando con una puesta de cuatro huevos. Ambos pájaros casi no salÃan ni para alimentarse, el macho pasaba todo el tiempo dentro del nido con la hembra.
Sobre los 15 dÃas de incubación, mientras atendÃa a las demás parejas veo al macho salr a comer con muy mal aspecto. Horrorizada descubro que tiene una herida enorme en la ingle. Lo cogà y le hice una cura con betadine y furacÃn crema. Es bien sabido que el tema de las cremas no es lo mas adecuado para las aves pero en este caso no me importaba el plumaje sino sencillamente salvarle la vida.
Le vendamos la pata con esparadrapo y gasa formándole una pequeña férula para que no lo moviera demasiado y no se hurgara en ella, optamos por separarle y ponerle en una jaula pequeña en casa donde le podiamos tener controlado. Como supondréis esto le sirvió el primer dia, al segundo ya se habia quitado todo por la noche y además se habÃa vuelto a morder con saña encontrándolo casi muerto debido a la perdida de sangre que habÃa tenido. En este momento tan delicado tuvimos que alimentarlo a mano hasta que se recuperara un poco y pudiera hacerlo por si mismo, además decidimos ponerle un collarÃn para impedir que se mordiera de nuevo.
Los huevos terminaron de incubarse artificialmente.
Cuando el pájaro se recuperó un poco decidimos colgar la jaulita en la que estaba de la jaula de crÃa asà hasta su recuperación.
El pájaro se recuperó completamente y lo devolvimos de nuevo a la jaula de crÃa con su pareja.
Por desgracia en la primavera siguiente, y eso que le hicimos una estrecha vigilancia, en cuanto la hembra levaba un par de dias con huevos volvió a ocurrir. Afortunadamente en esta ocasión no le dejamos que llegara a mayores y después de la cura le pusimos el collarÃn y no pudo pasar de ahÃ. Le quitamos los huevos a la hembra y le pusimos una puesta infértil del año pasado para evitar el gasto de energÃa innecesaria en puestas infértiles.
Fue durante la convalecencia del macho, una mañana mientras estaba dando de comer oigo un piar que cuando ubico de donde viene me sorprendo al descubrir que viene del nido de la jendaya, miro en su interior y veo que tiene un precioso pollo, fuerte y bien alimentado, el de la foto. El caso es que ella puso un quinto huevo ya sin el macho pero fértil del que nació este pollo que está sacando a delante. Nuestro miedo al retirarle los huevos era que al estar sola no atendiera bien a su prole pero parece que nos equivocamos por que no ha sido asà afortunadamente. Mientras su macho ya está casi recuperado esperando ser devuelto con su pareja y nosotros esperamos que sea la ultima vez que le pase esto. |
COMENTARIOS |
|
Las opiniones aqui expuestas son personales y exclusivas de cada usuario.
Por favor, no escribas en mayúsculas, si lo haces el comentario no será publicado
Los comentarios son moderados.
|
Arriba
|
|